Uno de los sueños que más recuerdo y que más me ha impactado,  fue una ocasión que soñé con el mismísimo Winston Churchill, aunque no fue de una manera grata, más bien repugnante y por demás extraña; creo que nunca olvidaré esa escena mental donde aparecía el tan distinguido sexagenario vestido con lencería, una muy parecida a la que usaba Lunch de Dragón Ball cuando el maestro Roshi les daba nuevos trajes de "entrenamiento".

 

El sueño comienza cuando por alguna razón desconocida debo buscar a mi hermano mayor, es una petición de mi madre, misión para la cuál mi hermano menor es mi compañero pero no el directamente responsable; entonces comenzamos una búsqueda empezando por su casa(es extraño que busquemos ahí, ya que en la vida real no tiene casa, vive con mis padres), al llegar vemos que es una casa vieja y de madera, digna del escenario principal de una película de terror, al tocar nos recibe una mujer hermosa, vestida de blanco y de piel muy pálida; ella nos dice que no pueden entrar ni elefantes ni girasoles, nos parece a mi hermano y a mi algo muy absurdo, así que pasamos sin ningún problema a la casa, fue entonces cuando notamos que alrededor de las ventanas de aquella casa, estaba todo rodeado de elefantes y girasoles viendo hacía al interior, con caras bastante tristes, todos ellos con figuras caricaturescas y de rasgos muy notorios, y no se porque razón estas caras de elefantes me daban una sensación entre miedo y lástima, quería ayudarlos pero tampoco quería salir y no volver a entrar; la chica que nos recibió nos dice que para poder subir necesitamos pasar una prueba espiritual y mejorarnos a nosotros mismos, cada quién debe pasar por separado y tendrá un sinodal que nos guiará a continuar; el primero en pasar soy yo, así que subo una escalera y abro una puerta, al cerrarse todo el fondo se vuelve difuso y de color rojo, hasta que se asienta en un burlesque lleno de símbolos de la bandera de Inglaterra, para mi sorpresa yo he dejado de ser hombre, soy una mujer de larga cabellera y muy delgada, muy parecida a Aline(una amiga mía que primero fue mi trabajadora), yo estaba en ropa interior infantil(con figuritas de Hello Kitty) y de color rosa, cuando aparece Winston Churchill, vestido de lencería y con una cara de deseo que daba miedo; me dice que para pasar esta prueba tengo que hacer el amor con él, al principio me niego, pero al final acepto para poder cumplir mi cometido, sin embargo cuando el comienza a manosearme e intentar besarme lo aviento de una patada, me es imposible continuar y le digo que prefiero morir a ser mancillado de esa forma, acto seguido el dice: "has pasado la prueba" y aparezco en último piso de la casa, curiosamente ya se encuentra mi hermano menor ahí, y vemos que esta lleno de cosas antiguas, la mayoría aparatos electrónicos de bulbos, por lo que mi hermano y yo asumimos que mi hermano no debe estar lejos(el estudio comunicaciones y electrónica y durante un tiempo el tuvo su cuarto lleno de aparatos electrónicos abiertos y regados), de pronto un cetro llama nuestra atención, es grande como para una persona de unos 5 metros, en el se ve una figurilla de Jesús crucificado, pero de color verde y de ojos rojos, sobre una montaña de cráneos y adornado por cientos de figuras de penes, senos y demás siluetas de alusiones sexuales; a mi se me ocurre tocarlo y esto hace que la figura de Jesús comience a abrir la boca y a escupir un liquido naranja fosforescente mientras comienza a girar, de pronto comienza a abrirse el piso y se escuchan sonidos de voces raras de tono grave y robótico, finalmente aparece un ente sombreado y con silueta humana, mi hermano y ya asumimos de inmediato que se trata del diablo y tratamos de huir, pero es inútil, comenzamos a hundirnos en el piso y antes de que mi cabeza se hunda por completo, levanto la mano y maldigo a aquel ser, diciendo que se pudra por que yo ya estoy(justo en este momento despierto de mi sueño)...¡despierto!(no sé porque digo esto cuando ya he despertado y abierto los ojos, supongo que me deje llevar por las emociones del sueño y en lugar de terminar la frase de mi sueño y decir "muerto", concluyo diciendo despierto haciendo alusión a que me he despertado).